¡Hola! Hoy os vengo a recomendar uno de mis libros
favoritos: Madame Bovary. Sé que no suena a un libro muy apetecible. Es un
clásico, escrito en el romanticismo, por lo que no tiene precisamente descripciones
cortas… pero es un libro que tiene una pluma preciosa y merece una oportunidad. Así que nunca me cansaré de
recomendarlo.
*ALERTA SPOILERS*
El libro nos cuenta la historia de Emma, una chica inconformista a más no poder. A lo largo de su vida busca continuamente mejorar su estatus social y personal, pero nunca nada le parece suficiente. Se casa con una persona buena, bondadosa y servicial pero se cansa de la monotonía y decide serle infiel varias veces. Aunque por su puesto también se cansa de aquellas personas con las que es infiel. Se cansa del pueblo donde vive y hace a su familia mudarse a otro más de su agrado, del cual obviamente también se acaba cansando. Además, continuamente necesita renovar su armario y muebles porque adivinad qué, tambien se cansa de ellos.
Leer esta novela me produjo una frustración enorme en muchas partes. ¿Cómo es posible que teniendo todas las comodidades a tu alcance engañes a todas las personas a tu alrededor para tus ideas egoístas y ambiciosas? Por supuesto, es indispensable tener metas y objetivos que alcanzar, pero cuando estos involucran arruinar a tu familia por tus caprichos o engañar a tu marido continuamente, tal vez hay un ligero problema. Y finalmente, se da cuenta de que todas estas ambiciones son totalmente insostenibles y la pobre Emma tiene un final bastante trágico cuando se desvelan todos sus caprichos y traiciones.
Pero a pesar de que llegues a odiar a Emma, este libro ofrece una moraleja muy importante. No podemos vivir continuamente anhelando lo que no tenemos y olvidando lo que nos ha costado conseguir lo que actualmente tenemos. Además, actualmente vivimos en una sociedad que continuamente nos exige escalar social, académica y laboralmente, por lo que a veces la necesidad de mejorar continuamente nuestra situación nos olvidamos de todo lo que hemos conseguido por el camino.
Y aunque Emma sea un poco difícil de coger cariño como personaje, pasa por muchas fases complicadas en su vida en las que no encuentra el sentido a lo que hace y busca sus propias formas de solucionarlo (más o menos eficientes). Por lo que en cierto modo no es tan complicado empatizar con ella y sus decisiones. Siempre que no se tomen como ejemplo, claro está.Así que, si alguien decidís leeros el libro o ya lo habéis
hecho, estaré encantada de escuchar vuestra opinión.
¡Muchas gracias por leerme!
See you soon:)
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